Cómo dejar de ser un ejecutor ansioso.
Atiende, que esto no es un consejo de productividad.
Atiende, que esto no es un consejo de productividad.
Esto puede cambiar la forma en la que emprendes para siempre.
Mira, puedes hacer mil cosas en tu negocio… y no avanzar ni un puto metro.
Y ya, ya sé que es jodido verse reflejado en eso.
Pero eso no le quita pizca de verdad.
Me pasa a mí.
Le pasa a todo el mundo.
Te levantas, abres el portátil y ahí estás otra vez.
Saltando de una tarea a otra.
Revisando emails.
Publicando en redes.
Anotando ideas.
Todo el puto día haciendo cosas.
Y, claro, te sientes “productivo”.
Pero, ¿avanzas o solo estás ocupado?
Insisto: ¿avanzas o solo estás ocupado?
Porque hay una diferencia brutal entre estar ocupado y avanzar.
La misma que existe entre ser un ejecutor ansioso y un emprendedor libre.
Y ahí está el problema.
Te sientes "productivo" porque estás siempre haciendo.
Pero estás corriendo en círculos.
Agotado. Sin tiempo y sin claridad.
Y lo más jodido… es que empiezas a creer que así es como debe ser.
Que si no estás ocupado, es que algo va mal.
Que si no estás agotado, es que no lo estás haciendo bien.
Que si no sufres, no avanzas.
Gilipolleces.
Ser libre no es estar ocupado.
Es saber qué hacer y qué no hacer.
Es saber parar.
Es decidir.
Y eso es justo lo que voy a enseñar a todos mis alumnos de la Mentoría en la lección de esta semana.
Te voy a enseñar cómo dejar de ser un ejecutor ansioso.
A dejar de correr en círculos y empezar a construir de verdad.
A hacer lo que importa.
No a agobiarte.
A decidir.
Y en definitiva, a construir un negocio que te dé vida. No que te la quite.
Por eso insisto en que puedes seguir ocupándote de mil cosas.
O puedes decidir entrar y aprender a construir de verdad.
Todo está bien, en cualquier caso.
Puedes seguir como estás.
Corriendo, agobiado, agotado.
O puedes entrar a la Mentoría antes del viernes a medianoche.
Porque después de esa hora, te pierdes esta información para siempre.
MENTORÍA DE NEGOCIOS LIBRES
PD: Si no tienes dirección, da igual cuánto te esfuerces. Siempre estarás ocupado, pero nunca avanzando
Entonces dime: ¿cuánto más vas a aguantar así?
En la Mentoría tienes mi acompañamiento estratégico para salir de ahí.
Mira, la salida: