Una cosa rápida, que hoy es viernes y mañana sábado.
Esta noche, a las 23:59 hora de Ansalonga (Andorra) la masterclass de membresías sube a 130€.
Eso significa que no podrás comprarla al precio actual nunca más.
Entonces.
Me han soplado que llevas toda la semana abriendo los correos, entrando en la página y rumiando si comprar o no.
Bien.
¿Sabes por qué te lo estás pensando tanto?
No, no es por el precio.
No hace falta pensar tanto una decisión que cuesta lo mismo que dos cenas malas y vale infinitamente más.
No es que no puedas.
Tampoco es que estés esperando a ver si baja. Si me conoces ya sabes que eso no pasará. Nunca.
Es otra cosa.
¿Qué cosa?
Es el miedo ese que te hace moverte… pero como hámster en rueda.
Que no te deja parar de improvisar.
Que no te deja soltar el caos.
Que no te deja montar un sistema de verdad, porque si lo haces, ya no habrá excusas.
Ya no podrás decir que no sabías.
Ya no podrás esconderte detrás del “es que ahora no es buen momento”.
Porque sabrás exactamente lo que hay que hacer para generar ingresos recurrentes y predecibles en tu negocio…. Y te tocará hacerlo.
Y eso… acojona.
Mira.
El caos agota. Pero también da identidad.
Te da tema de conversación en eventos de networking de emprendedores a los que jamás deberías ir.
Te hace sentir que estás “a tope”, que “no te da la vida”.
Te hace creer que estás avanzando.
Aunque lleves tres años dando vueltas al mismo proyecto y estés más quemado que una pizza de gasolinera.
El miedo es una puta mierda, hazme caso.
Por eso te digo que decidas.
Pero decide tú. Porque si no decides tú, decide la inercia. Y la inercia no tiene pinta de querer ayudarte.
Entonces dime: ¿de verdad necesitas más tiempo?
¿O necesitas una decisión?
Una sola.
Esta:
Montar una membresía bien hecha, predecible, rentable y libre aprendiendo de un tipo que vive de sus membresías desde 2017 y que ha ayudado a miles de emprendedores a crear las suyas.
Y dejarte de historias.
El paso a paso lo tienes aquí:
MEMBRESÍAS SALVAJEMENTE LIBRES — 120€
(a las 23:59h sube a 130€)
PD: En Ansalonga está mi cafetería favorita de aquí de Andorra.
Casi que te diría que es mi cafetería favorita del planeta. Y eso que he probado unas cuantas.
Y no es porque te encuentres a empresarios exitosos como a los chavales de Tengo un plan (que tienen una membresía cojonuda) un jueves cualquiera desayunando, sino porque hacen un flat white cojonudo.
Si vienes a Andorra, tienes que ir al Brulèe 2.0, hazme caso.