Lo que te acojona no es hacerlo mal, lo que te acojona es que funcione.
Ayer recibí un email de un suscriptor de esta casa que me dio un poco de pena.
Ayer recibí un email de un suscriptor de esta casa que me dio un poco de pena.
Fue amable, no te creas. Pero me dio pena.
Era un tipo que me decía: “llevo casi seis meses pico pala preparando mi membresía, ya está a punto. ¿Octubre te parece buen mes para salir?”
Al loro:
Seis.
Meses.
Preparando.
Y no es el primero.
Hay gente ahí fuera que tiene pizarras llenas de ideas, Notion con trescientos boards, audios en wasap con lluvias de conceptos, lluvias de formatos, lluvias de lluvias.
Y cero ingresos.
Porque no lanzan.
Y no lanzan porque esperan a tenerlo todo perfectamente definido.
Quieren tener clara la comunidad, el número de vídeos, la estructura de los módulos, la duración exacta, los bonus sorpresa y el puto día que mandarán la newsletter cada semana.
(sin entrar en que nada de eso es realmente necesario para montar una membresía rentable, pero bueno).
En el fondo lo entiendo, eh.
De verdad.
Planificar da sensación de control.
Pensar da la falsa paz de que estás haciendo algo útil.
Pero es mentira.
Lo único que haces es procrastinar con traje.
Porque te acojona.
No te acojona hacerlo mal, ojo.
Te acojona que funcione y tengas que mantenerlo.
Porque crees que una membresía es una maquinaria gigante que tienes que alimentar cada día.
Y no.
Una buena membresía no es eso.
No es un Netflix de tu nicho.
No es una fiesta continua.
No es un ritmo frenético de contenidos para que no se te aburran los suscriptores.
Una membresía es un sistema de ingresos recurrentes.
Es una oferta recurrente que resuelve un problema recurrente con una estructura que puedas sostener cómodamente.
Sin fuegos artificiales, ni luces de neón, ni necesidad de disfrazar cada video de fiesta.
Sin contenidos por volumen.
Sin tener que estar cada semana preguntándoles si están contentos.
Hazme caso, que vivo desde 2017 de mis membresías.
Por eso, antes de preguntarte cuántos cursos tendrá tu membresía, deberías preguntarte:
“¿Qué quiero hacer con mi membresía sin querer cortarme las venas en abril?”
Y a partir de ahí, construir.
Eso es lo que explico dentro de esta masterclass.
Cómo montar una membresía simple, sostenible, rentable y sin volverte gilipollas en el intento:
SISTEMA DE INGRESOS RECURRENTES (130€)
(hasta el viernes 17 a las 23:59h, que sube a 140€)
PD: Si llevas medio año pensando la membresía perfecta pero no te atreves a lanzar…
es que no estás buscando perfección.
Estás buscando excusas.
Lo siento, se te acaban si pinchas ahí y lees la página: